Cuando Herodes supo que los magos regresaron a sus ciudades sin informarle sobre el paradero del Hijo de Dios recién nacido, se enojó al punto de mandar a matar a todos los niños que tuvieran menos de dos años. Ante estos hechos, un ángel se aparece a José en sueños, advirtiéndole sobre lo que Herodes pretendía hacer con el niño Jesús, y le aconseja que huyan a Egipto para proteger al niño. Este viaje que emprenden Jesús, María y José simboliza el Éxodo del pueblo hebreo cuando estuvo esclavizado en Egipto.