En esta escena hay muerte, dolor y caos. Herodes, al sentirse engañado por los magos y ver amenazado su poder, mandó matar a todos los niños menores de dos años....
En esta escena hay muerte, dolor y caos. Herodes, al sentirse engañado por los magos y ver amenazado su poder, mandó matar a todos los niños menores de dos años. Sólo así estaría seguro de que también moriría el nuevo rey de los judíos. Las madres sufren, lloran, ruegan, intentan proteger a sus hijos. Algunas están hincadas, otras de pie, una más asesina a un soldado romano para salvar a su criatura. Los soldados, como en otros pasajes, representan la obediencia ciega y sin reflexión; los caballos son el símbolo de lo que acaba y de lo que renace. Los niños son víctimas de un gobernante inseguro e iracundo; como simbolizan la inocencia, la pureza, la alegría y la frescura, su muerte implica un daño profundo, entendido éste como una historia que se quedará sin ramas y cuyo tronco, que hace referencia a los padres, dejará de florecer. Cabe mencionar que en la mayoría de los grandes imperios se colocaban estatuas de leones para representar la vigilancia y la custodia.